Frases que delatan el espejo que debemos ver. La expuesta es una de ellas. Una que denomino de las grandes.
Grande porque es sencilla. Grande porque se puede vivir en pequeñas porciones, y comprobar si algo de verdad contiene.
Las frases que ayudan a vivir son aquellas que puedes comprobar. Gracias a ellas despiertas.
A veces me pregunto a quién podría agradecer la infinidad de sencillas frases que contienen retazos del Universo, y nos hacen mirar el interior, y descubrir que, efectivamente, "somos polvo de estrellas".
Cuando leo alguna de estas frases mi primera sonrisa es de agradecimiento.
Se nos ayuda constantemente. El ser humano somos privilegiados porque nunca jamás se nos ha dejado solos.
Se nos da el libre albedrío para que seamos desde cero quienes impulsamos el sentido común de la conciencia.
La mente, tras leer la frase, me dice que habla que del dolor se aprende. Pero, el corazón no menciona el dolor. No lo necesita para expresar que el cambio es la manifestación de la belleza, unida al perfume del Sendero.
¿Qué madre no acepta el dolor del parto?
¿Qué oruga se rebela a ser mariposa?
Si cambiar es nacer, bienvenida la vida que nos ofrece cada instante para saborearlo: el dolor puede ser un recodo, y la alegría lo que viene después.
Cuando alguien deja la vida física es porque ha finalizado el último recodo antes de ser Mariposa.
Quienes viven y comparten su sencillez, aun en vida, son hermosas mariposas que no enseñan las alas, pero evocan una porción del perfume del Universo.
Son personas, pero son Puentes que nos relatan que la luz es nuestra compañera inseparable.
Genuinas mariposas, genuinos afluentes que enseñan el Camino al Gran Océano.
Gracias...
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Etiquetas: educación, reflexiones, filosofía, pensamiento, comunicación, amistad, utopía, ética
1 comentario:
Me ha gustado mucho la frase de Buda, y luego el desarrollo que has realizado de la misma. Es cierto, temeemos stodos los cambios, aunque sea para mejor, nuestra mente desconfía y se apalanca en ella misma, y entiendo ue es eso lo que crea dolor, en vez de dejarse llevar por la Vida misma. Gracias
Juan
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